jueves, 2 de diciembre de 2010

Lágrimas de miel...


Eran muy distintos, demasiado... pero cuando se miraban, sus ojos se iluminaban de aquel reflejo luminoso, tan perfecto. A veces, se buscaban, nunca se encontraban... porque cuando se encontraban, nunca se veían y, nunca se veían, porque eran distintos, pero, por ser distintos, se querían, no obstante, por quererse, se buscaban... lo que hacia que mirarse se haga, en algunas ocasiones, mágico...

2 comentarios:

  1. "sus ojos se iluminaban de aquel reflejo luminoso"

    JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA NO BROMEES, TIO, NO BROMEES JAJAJAJA
    Buen, chiste. Joder, se me iluminaron los ojos de un reflejo luminoso cuando lo lei.
    Coño, si van a iluminarse de un reflejo oscuro. Me parto de risa, tio, sigue de esas.

    Alethea.

    ResponderEliminar
  2. coño, que seguro la hembra a la que le escribes esto te mira por la casualidad de pasar su mirada y encontrarse con tu idiota rostro! y si no se la escribes a ninguna hembra se lo estas escribiendo a una musa inalcanzable para un ser tan patetico como tu. cortate las venas, golfa.

    Camus

    ResponderEliminar