miércoles, 16 de marzo de 2011

Las nubes comenzaron a derretirse...

La lluvia corta y pasajera estaba ahí, quieta e inmóvil y él, aunque tenga su don de fácil y desenvuelto para hablar, nunca pudo ir más allá de los primeros roses de agua... pero al muchacho le fascinaba ver esas gotas, oír esa perfección de sonidos que al unísono, parecían una canción... él amaba esa lluvia, y poco a poco, sentía que las nubes negras que contenían el agua se irían lejos, muy lejos, pero a cambio quedaría un arco iris, uno que comience en su corazón y otro en el de la lluvia...

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